Michael Schumacher logró terminar décimo y sumar un punto. Sufrió una carrera dura en Australia en el que el Virgin de Lucas di Grassi y el Lotus de Heikki Kovalainen volvían a pasarle tras ser superados por el conductor de Mercedes.
"Podría haber tenido una buena carrera, así que ha sido una lástima que me golpearan justo después de la salida. Ese incidente decidió mi carrera, obviamente, pero este tipo de cosas suceden y hay que acaba diciendo, 'Así son las carreras. Tuve que afrontar el resto de la carrera desde la última posición, pero tengo que decir que todavía estaba divirtiéndome con nuestro ritmo ya que era prometedor y parte de la carrera he ido más rápido que el grupo de cabeza. Fue muy agradable sumar un punto y podemos sentirnos bien para la próxima carrera, donde nos esperan a otro desafío".
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