A estas alturas de la película todos sabemos que Michael Schumacher fue el niño mimado y por tanto número uno de todas y cada una de las escuderías por la que pasó. Sin embargo, Brawn ha querido dejar claro que eso no va a suceder en Mercedes, a excepción de que uno de los pilotos tenga posibilidades reales de optar al título mundial: "Dejaré que el puesto de piloto número uno se lo peleen entre ellos. Quien sea el más rápido y gane más carreras, sin duda será nuestro piloto favorito. Pero de inicio daremos igualdad a ambos.
Lo que no quita, que llegado el momento en que uno de los dos tenga opciones matemáticas de ser campeón, entonces tendremos que establecer prioridades. Este año lo haremos así, dejaremos que ellos establezcan el orden, que compitan para también ayudar al equipo. Es la mejor forma de lograr los objetivos. No tenemos un número uno y no pretendemos tenerlo".
David Coulthard actualmente asesor de Red-Bull escribió en su columna para el diario 'Telegraph' que no tiene dudas que Nico recibirá igual tratamiento que Schumacher y recordó su época en McLaren: "Mercedes solía tirar una moneda al aire para dedicir quien de nosotros tenía el motor nuevo. Yo no creo que él (Rosberg) será capaz de igualar los niveles de consistencia de Michael. Tengo alguna simpatía por Rosberg y esta es una oportunidad para que él realmente de un paso adelante y sea un héroe por si mismo".
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